Esta tradición mexicana data del año 1526 -debe ser una de las más antiguas comenzó solo 5 años después de ser destruida la Gran Tenochtitlán.
Se celebra cada año el jueves después de la Santísima Trinidad. Tradicionalmente en esta fecha, los niños se visten de inditos y se venden mulitas y panzones con gran colorido. Se acostumbra rendir culto al Santísimo Sacramento el centro de la festividad era la celebración de la Misa, seguida de una procesión que partía del Zócalo. Había también representaciones teatrales alusivas, música y vendimia especial.
Se le denomina día de las mulas porque la fiesta congregaba artesanos y comerciantes de distintos rumbos del país, que traían sus mulas cargadas con frutos de las cosechas para ofrecérselas a Dios en señal de agradecimiento.
También se dice que iba un señor con su mula, y la mulita iba cargada de mercancía y justo frente al Santísimo, la mula se hincó y ya no quiso caminar más, porque reconoció a Dios en la eucaristía. Por eso se dice que es el día en que las mulas reconocieron a Cristo presente en la eucaristía y los hombres por soberbia no.
En México, los muñecos panzones van más enfocados a la idea de lo hacendados, que como vivían llenos de lujos y demás, pues hacían crecer la panza.
Pero en Puebla en especial se celebra con una verbena popular, en donde se ponen puestos en las cuales encontrarás mulitas de muchas formas y sabores, y de todos tamaños.
Muñecas de cartón que son hechos con goma y papel, de formas toscas y colores vistosos, los cuales los hacen muy atractivos.
Pero en Puebla en especial se celebra con una verbena popular, en donde se ponen puestos en las cuales encontrarás mulitas de muchas formas y sabores, y de todos tamaños.
Muñecas de cartón que son hechos con goma y papel, de formas toscas y colores vistosos, los cuales los hacen muy atractivos.
También existen los clásicos caballitos de cartón y con el palo de escoba, la verdad son juguetes típicos.
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